Cómo vender una vivienda privativa tras el matrimonio
En España es muy común usar una vivienda privativa, comprada por uno de los cónyuges antes de contraer matrimonio, como vivienda familiar y que después del matrimonio se pague parte de la hipoteca con dinero ganancial. Sin embargo, ¿qué pasa en el caso de un divorcio? En este artículo de Envy Realty te contamos todos los detalles sobre cómo vender una vivienda privativa tras el matrimonio. ¡Sigue leyendo!
¿Cuál es la situación legal de una vivienda privativa?
Antes de saber cómo vender una vivienda privativa tras el matrimonio, es importante tener claro cuál es la situación legal de una vivienda privativa en diferentes casos. Si una vivienda se ha adquirido antes del matrimonio, esta mantiene su carácter privativo, por mucho que la pareja se haya casado en bienes gananciales. Una vez sabido esto, es importante distinguir una serie de circunstancias:
- Si la vivienda ha sido pagada entera antes del matrimonio, la vivienda sigue siendo privativa del cónyuge que la adquirió.
- Si la vivienda tiene una hipoteca al nombre del cónyuge que la adquirió y se han casado en separación de bienes, la vivienda seguirá siendo privativa del cónyuge que la adquirió.
- Si la vivienda tiene una hipoteca al nombre del cónyuge que la adquirió y se han casado en bienes gananciales, la vivienda corresponde a la sociedad de gananciales y al cónyuge que la compró en la proporción que haya pagado cada uno antes y después del matrimonio.
En el caso de divorcio, si se cumple este último caso, el beneficio se tendría que repartir con esas proporciones. Por ejemplo, si una persona paga el 30 % de una vivienda antes de casarse, después se casa en gananciales y entre los dos pagan el 70 % restante a partes iguales, en el caso de divorciarse, al cónyuge que adquirió la casa le pertenece el 65 % de la misma, mientras que al otro cónyuge solo el 35 % que pagó dentro del régimen de bienes gananciales.
¿Cómo vender una vivienda privativa tras el matrimonio si es una segunda residencia?
El beneficio que se reparte en función del porcentaje de dinero aportado por cada cónyuge solo se aplica en el caso de la residencia habitual. Es decir, si una persona compra una segunda residencia antes del matrimonio y después el otro cónyuge empieza a pagar también la hipoteca con dinero ganancial, esa vivienda sigue teniendo carácter privativo de la persona que la compró. Además, este sería el caso del resto de los bienes comprados antes del matrimonio, como coches, plazas de garaje o cualquier otro bien.
En definitiva, cómo vender una vivienda privativa tras el matrimonio puede sonar muy complicado, pero lo cierto es que es mucho más sencillo de lo que parece. Recuerda que, si necesitas la ayuda de profesionales inmobiliarios para realizar esta operación, en Envy Realty estamos a tu disposición para lo que necesites.